martes, 8 de diciembre de 2009

7 comentarios:

  1. Vaya le he dado dos veces. Lo siento. ¿alguien sabe arreglarlo?

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  2. Veo Edwin que no te da indiferencia. Eso es bueno pero yo no le doy la misma lectura que tú, auqnue ya se que ser la autora no da el derecho de significación. Para mí es madurez y amistad. Yo me dejo ganar que es lo que tú quieres pero tú no te quedas con la que me gusta que es lo que has hecho toda la vida. Es inteligencia emocional y relativismo del concepto del ganar. Lo que tú crees que es ganar hoy mañana puede ser perder, así que perder o ganar realmente no es importante. Por qué crees tú que es desolador?

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  3. Por la actitud del David al final, con la chica, finalmente tiene a su lado a alguien con quien comunicarse y tal vez irse, y tal vez pasar la noche, y tal vez sentir algo parecido al amor o a la compañía, es decir, lo que ha estado pensando, queriendo, deseando toda la noche, y sin embargo calla y espera a que su amigo llegue. Lo veo desolador porque tal vez yo no haría eso. Tal vez me he implicado mucho con el personaje.

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  4. Sí, podría ser esa chica o la del próximo sábado. Pero alguien que siempre ha dependido de su amigo para ligar no va a aprender de la noche a la mañana, Edwin. Aunque tú quieres un final feliz de cuento no siempre los finales son así. NO es un final triste en cualquier caso porque decidir perder para ganar es un logro, un cambio, un paso. NOs vemos pronto.

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